15 de Julio de 2023. El Observatorio Vial de la Asociación Automotriz del Perú (AAP) revela que la cifra del 2022 de conversión de vehículos a gas natural comprimido (GNC) triplicó el resultado del 2019 (año prepandemia).
“La conversión de vehículos a gas natural vehicular (GNV) durante el 2022 -73,563 vehículos en total- superó en más de 350% frente al 2019, un año prepandemia”, así lo afirmó la AAP a través del último informe dado a conocer por su Observatorio Vial.
Al respecto, Alberto Morisaki, gerente de Estudios Económicos y Estadísticas de la AAP, señaló que una de las razones por la que los peruanos optaron por la conversión a GNV de sus vehículos fue el incremento de precios de los combustibles fósiles. “No hay dudas de que el aumento de la inflación en el país, acelerada por la guerra entre Rusia y Ucrania, impactó en el incremento de precios del petróleo, por lo que muchos peruanos optaron por una salida más económica como el GNV”.
En el 2022, añadió, se alcanzó la cifra récord de 394,048 vehículos en circulación en todo el Perú convertidos a gas natural y 346 estaciones de servicio que proveen este combustible distribuidas a lo largo del país.
“A pesar de que en el Perú se ha logrado vender en el 2022 un total de 769,290 metros cúbicos de gas vehicular, la cifra más alta de los últimos años, desde la AAP estamos convencidos de que se debe impulsar la masificación del gas natural a través de una estrategia articulada que involucre la participación del sector privado, brindando los incentivos necesarios para que a través de mecanismos de inversión público-privado, y la regulación y fiscalización necesaria se asegure el cumplimiento de los compromisos asumidos en ella”, resaltó Morisaki, tras destacar que un avance interesante es el otorgamiento del bono de conversión que está promoviendo el Fondo de Inclusión Social Energético (FISE). Sin embargo, advierte que ahora es necesario que se dicten medidas para incrementar el número de lugares para el abastecimiento.
En ese sentido agregó que el Estado se debe enfocar en poner en vigencia las normas que sean necesarias para que el Perú migre, de manera efectiva, a una matriz energética en el transporte compuesta por combustibles menos contaminantes ya que se encuentra en el puesto 38 como uno de los países con peor calidad de aire en el mundo y ocupa el primer lugar en Latinoamérica de acuerdo al reporte de Air Quality del 2022.